Toni Smothers
Scripture Reading: Psalms 33:9-12
Click here to read the scripture
Scripture Quote: Why, you do not even know what will happen tomorrow. What is your life? You are a mist that appears for a little while and then vanishes. James 4:14 (NIV)
We plan our future as if we know that life will accommodate our wishes. We are naïve in thinking we can know ahead of time what will occur in our lives. We can’t actually predict whether we will prosper or be overwhelmed with adversity. We cannot forecast the future, or this day, or even a single hour. Still, we always make our plans as if we can see with certainty all that will happen. The truth is that the future is a frail and uncertain thing, unknown to us all.
Rather than obsess about future plans that may or may not occur, being overly confident in our own abilities, we could be realistic about how little is really in our control. Also, seriously consider the possibility that our lives might be cut short at any time - All our big plans would certainly fail then. Preferably, we could use all that ill spent energy to be living out God’s will in preparation for our higher world to come in Paradise with our Lord. We could surrender each day to God and trust in His good guidance and plans for us. We are children of the Highest God and joint heirs with Jesus, who have already been given a place in eternity - Believers can plan on that!
Today’s meditation: Like a dissipated vapor, so life on earth ends.
Memory Verse: He remembered that they were but flesh, a passing breeze that does not return. Psalms 78:39 (NIV)
Gasta la vida sabiamente
Toni sofoca
Lectura bíblica: Salmos 33: 9-12
Haga clic aquí para leer la escritura
Cita de las Escrituras: ¿Por qué? Ni siquiera sabes lo que sucederá mañana. ¿Qué es tu vida? Eres una niebla que aparece por un tiempo y luego desaparece. Santiago 4:14 (NVI)
Planeamos nuestro futuro como si supiéramos que la vida se acomodará a nuestros deseos. Somos ingenuos al pensar que podemos saber de antemano lo que ocurrirá en nuestras vidas. En realidad, no podemos predecir si vamos a prosperar o si nos veremos abrumados por la adversidad. No podemos predecir el futuro, ni este día, ni siquiera una hora. Aún así, siempre hacemos nuestros planes como si pudiéramos ver con certeza todo lo que sucederá. La verdad es que el futuro es una cosa frágil e incierta, desconocida para todos nosotros.
En lugar de obsesionarnos con planes futuros que pueden ocurrir o no, tener demasiada confianza en nuestras propias capacidades, podemos ser realistas sobre lo poco que realmente está bajo nuestro control. Además, considere seriamente la posibilidad de que nuestras vidas se vean truncadas en cualquier momento. Todos nuestros grandes planes ciertamente fracasarían entonces. Preferiblemente, podríamos usar toda esa energía gastada para vivir la voluntad de Dios en preparación para que nuestro mundo superior venga al Paraíso con nuestro Señor. Podríamos rendirnos cada día a Dios y confiar en su buena guía y planes para nosotros. Somos hijos del Dios más elevado y herederos conjuntos de Jesús, a quienes ya se les ha dado un lugar en la eternidad: ¡los creyentes pueden planear eso!
La meditación de hoy: como un vapor disipado, así termina la vida en la tierra.
Versículo para memorizar: recordó que no eran más que carne, una brisa pasajera que no regresa. Salmos 78:39 (NVI)